¿Mató su entrenamiento, pero ahora ni siquiera puede caminar al baño sin experimentar dolor muscular? Es cierto que es la peor parte del entrenamiento, pero no hay forma de evitar sentir un poco de dolor. Si desea aliviar algo del dolor, utilice nuestras formas efectivas para deshacerse de los músculos adoloridos después de su entrenamiento.
Tratamientos para el dolor muscular: inmediatamente después de su entrenamiento
Estírate siempre DESPUÉS de hacer ejercicio
Estirarse a lo largo del día o después de hacer ejercicio puede aliviar enormemente el dolor muscular. Esfuérzate por incorporar el estiramiento en tu rutina diaria si quieres prevenir los dolores musculares. Pero nunca se estire antes de su entrenamiento.
Beba suficiente agua después de hacer ejercicio
La deshidratación puede causar una variedad de problemas, incluido el dolor muscular. Asegúrate de hidratarte adecuadamente antes de hacer ejercicio para evitar el dolor muscular. Con una hidratación adecuada, se pueden prevenir los calambres y se reduce el dolor muscular después del entrenamiento.
Duchas de contraste frío-calor
Las duchas de contraste frío-calor aumentan el flujo sanguíneo y ayudan a eliminar la inflamación del músculo. Simplemente tome una ducha de 5 minutos y alterne entre 20 segundos de agua fría y 10 segundos de agua caliente. Especialmente, se ha descubierto que los baños fríos reducen significativamente el dolor muscular, particularmente en comparación con el reposo o la no intervención después de un entrenamiento.
Tratamientos para el dolor muscular: los días posteriores
Descanso y recuperación
Dormir lo suficiente y descansar el cuerpo puede ser el tratamiento más eficaz contra los dolores musculares. Además, la recuperación activa, que es un ejercicio ligero durante la fase de recuperación, puede estimular el flujo sanguíneo a los músculos para ayudar a reducir el dolor muscular. La recuperación activa puede incluir natación o trote ligero.
Come la comida adecuada
Los músculos adoloridos necesitan principalmente proteínas junto con carbohidratos y grasas para repararse. Elija fuentes naturales de proteínas como pescado, aves, carnes magras, nueces, lentejas y quinua. Además, los alimentos ricos en antioxidantes, como las granadas y la col rizada, pueden mejorar su recuperación de los dolores musculares.
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Masaje
El masaje elimina la tensión de los músculos adoloridos. Si no puede pagar una terapia de masaje profesional, pregúntele a un amigo o hágalo usted mismo. Puede masajear el músculo dolorido hasta por 20 minutos para ayudar a reducir el dolor después de un entrenamiento duro.
Aplicar calor
Si sus músculos todavía están adoloridos 2 o 3 días después del tratamiento, considere aplicar calor. Puede usar una almohadilla térmica o dejar correr agua tibia sobre un paño.
Prueba el rodillo de espuma
El rodillo de espuma es una técnica económica para obtener un masaje en casa para aliviar el dolor muscular. Para usar un rodillo de espuma, acuéstese en el piso con el rodillo de espuma debajo de usted. Haga rodar suavemente su cuerpo a lo largo del rodillo de espuma donde le duele el músculo. Repita el rodillo de espuma de 5 a 6 veces a la semana durante 10 a 15 minutos a la vez.
Consejos de expertos contra los dolores musculares
Zumo de cereza
Al menos 2 estudios británicos han demostrado que el jugo de cereza acelera la recuperación del ejercicio intenso. Los científicos creen que los flavonoides, antioxidantes y compuestos antiinflamatorios del jugo de cereza ayudan a prevenir el dolor muscular.
Crema relajante muscular casera
Simplemente caliente un poco de aceite de coco y mezcle unas gotas de menta y aceite de eucalipto. Luego masajee sus músculos adoloridos con él. El aceite de menta es un relajante muscular y analgésico natural, mientras que el eucalipto estimula el flujo sanguíneo.
sal de Epsom
Se sabe que la sal de Epsom alivia el dolor muscular, reduce la inflamación y ayuda a reducir el dolor corporal. Mezcle una taza de sal de Epsom con 1/4 taza de sal marina. Agregue 4-5 gotas de aceite de eucalipto, ponga todo en agua tibia para baño caliente y sumérjase durante unos 20-30 minutos.
Aceite de lavanda
El aceite de lavanda es un famoso relajante muscular. También se conoce como antiespasmódico, analgésico, que significa analgésico y antiinflamatorio. Úselo en un baño tibio o masajee sus músculos adoloridos con él, esto ayudará a calmar sus músculos y a relajarlos.